En un registro que va desde el naif hasta el grotesco, Saudade tracciona temas y procedimientos poco usuales en nuestra poesía. Audaz sin aspavientos, su voz se percibe verdadera: una mirada de mujer que se aleja de los estereotipos, que plena de desparpajo atrae tanto como desconcierta.<p/> María Teresa Andruetto<p/> La gran casa de la poesía admite todo menos imposturas. Los cimientos de la escritura poética, asentados en una tradición de vida y cultura que no podemos soslayar, crean sin embargo en toda contemporaniedad nuevos enfoques de los viejos y perennes temas, y logra hacer brillar la palabra con destellos inéditos. Es el caso de Saudade, de Van Cez, libro en el que intuímos verdad y certificamos un trabajo minucioso del lenguaje. Berdd que conmueve, verdad dicha con lenguaje convicente. <p/> Leonardo Martínez<p/> "Saudade" revela no sólo a una poeta talentosa y de lecturas bien aprovechadas, sino que muestra una voz madura que, sin desechar ni desafiar las tradiciones líricas, se aventura en renovaciones formales y de motivos, en una búsqueda valiosa por no quedar atrapada en fórmulas de moda. Más que eso: allí donde muchos se caen, en sus intentos vanguardistas, Van Cez sale airosa, caminando sobre la cuerda floja sin incurrir en lo banal o el exhibicionismo gratuitos"<p/> Raúl O. Artola.