El amor de pareja es el mejor artista de todos los tiempos. Es la musa que inspira a cualquiera. Nadie puede resistirse ante él, jamás dejará de existir. Es sublime por naturaleza, aunque se quiera ocultar siempre vuelve a repetirse una y otra vez. Las encrucijadas, laberintos e incertidumbres suelen aparecer en la convivencia, sin poder doblegar el advenimiento temido de las crisis. Pero nunca se debe perder de vista la luz de esa mirada que guía por el camino de las posibles soluciones, a todo lo que se cree insuperable. Nunca temas a la oscuridad. No permitas que la sombra del miedo atrape tu alma. Siempre encontrarás una luz que haga brillar tu camino. A veces nos quejamos de las pruebas y las dificultades que nos pone la vida, pero en verdad tendríamos que estar agradecidos y ver las cosas positivas que ella misma otorga, gratificar por esas pequeñas cosas que el destino nos coloca en el camino.